Triunfo de brega de España ante Francia

Isa Sánchez lucha por un balón con Dumerc. -EFE

Quinto triunfo de brega, de calidad ante Francia (53-63). Victoria de Isa Sánchez (15 puntos), importante cuando España no tenía recursos, básica cuando le sobraban. Triunfo de Amaya Valdemoro, capaz de pasar desapercibida tres cuartos y exhibirse en el último. La selección sigue invicta en el Eurobasket y llegará a cuartos de final como primera de grupo F si el miércoles gana a Rusia, su torturador de siempre.

España demostró ante la selección francesa que está preparada. Sabe no ceder demasiado cuando lo hace mal y lograr grandes parciales cuando juega como le gusta, a la contra y con una gran defensa. El grupo de Evaristo Pérez empezó perdiendo el último período por seis puntos y en siete minutos ya había logrado una diferencia a favor de 12.

El primer cuarto fue un acto reivindicativo de Luci Pascua. Puede ser decisiva si no se pierde en faltas personales innecesarias. Y ante Francia no lo hizo, sino que fue la cinco que necesita el equipo. Soberbia ante portentos como Emmeline Ndongue y Sandrine Gruda, la pívot catalana anotó siete de los primeros 11 puntos de la selección.

Gruda, protagonista

Pascua cedió el protagonismo del encuentro a su homónima en el conjunto francés: Gruda, músculo, velocidad -pese a sus 1'92- y veteranía -a pesar de tener sólo 20 años-. La pívot del Ekaterinburgo lanzó a su equipo en el segundo cuarto y acentuó los despistes de España en defensa. Algo de lo que había pecado especialmente durante los partidos de preparación. Cuando

Todos (o casi) los rebotes eran de Francia. Gruda (nueve puntos en este período y 13 en total) competía con Isa Sánchez, talento lleno de casta, ambición al límite. Hasta ocho puntos sumó la alero sevillana en el segundo cuarto, muy igualado, jugado en la zona (29-29). El tiro exterior parecía un recurso primitivo.

Sin el dominio del rebote, con poca concentración en defensa y fallando tiros claros, España naufragó en la reanudación. En los primeros cinco minutos sólo anotó tres puntos: otra canasta de Pascua y un tiro libre de Elisa Aguilar -su único punto en todo el partido-. Francia jugaba a otro ritmo y con otra arma: el contacto físico. La mayor envergadura de sus jugadoras le beneficiaba en un duelo donde los árbitros apenas señalaban personales. Y un triple de Celine Dumerc puso a Francia seis por encima (42-36, minuto 29).

El otro plan

Evaristo Pérez apostó por otro plan. Por el mejor en este caso: Laia Palau sería la base del último cuarto. La jugadora del Ros no tardó nada en demostrarlo. En su primer jugada, en su primer uno contra uno, le ganó la posición a Sauret-Gillespie y le sacó la personal. Metió los dos tiros libres: fue el primer paso de la remontada de la selección. Gruda, el gran peligro en el segundo cuarto, era una jugadora muy menor sin menos espacios, con una defensa más agresiva, acumulaba tiros que durante su trayectoria se veía que no entrarían. Las piedras no suelen hacerlo.

Todo era diferente: España jugaba rápido, defendiendo en zona 2-3 y así es complicado pararla. Más si cabe si Valdemoro aparece. La alero del Samara lo hizo en los últimos minutos. Primero para rentabilizar el enésimo robo de Isa Sánchez (48-47, minuto 32). Después para sentenciar el partido con otros nueve puntos (17 en total). Fue la gran protagonista de un parcial de 3-15 (51-57, minuto 37) que acabó con las esperanzas de Francia. Por mucho que su base, Edwige Lawson, horrible, anotase por fin un triple (1/4 y 0/5). Gruda no decidió más. España ya tenía su quinta victoria en el Eurobasket. El próximo reto será el miércoles Rusia, que cortó su buena progresión en el Mundial de Brasil.

Francia 53 (9+20+17+7): Le Dréan (5), Gruda (13), Lawson-Wade (3), Sauret-Guillespie (4) y Dijon (4) –quinteto inicial-, Beikes, Dumerc (3), Reghaissia, Gomis (5), Bade (2), Ndongue (8) y Yacoubou (4).

España 63 (13+16+11+23): Pascua (13), Palau (4), Aguilar (1), Valdemoro (17), Montañana (7) y Pascua (13) –quinteto inicial-, Camps, Sánchez (15), Martínez, Zurro (6) y Lima.