La exquisitez del Celta

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La número 6 y la 11 se dan la mano. Sonríen. Son titulares en el Palau Blaugrana. Son Tamara Abalde y Alba Torrens, dos de las protagonistas del equipo más exquisito que he visto esta temporada: el Real Club Celta Vigourbán.

Descaro y mucha autoestima tiene Tamara Abalde (Ferrol, 1989). Lo demostró en su primera acción ante el UB Barça: cogió un rebote, entre los brazos musculosos de Ingrid Pons y Kelly Schumacher, y anotó. Era una gozada ver cómo compensaba su evidente inferioridad física con mucha entrega y pillería. Con 18 años y veintitantos días. Casi nada.

A su lado corría otra pequeña triunfadora: Alba Torrens (Benissalem, 1989). La alero mallorquina escribió gran parte del primer cuarto. Dos triples suyos casi consecutivos y una canasta de dos provocaron que Sílvia Font solicitase tiempo muerto. Acabó el período con 12, y el partido con 20. Sublime. 29 puntos de valoración: segunda mejor jugadora de la jornada junto a Isa Sánchez, del Acis Incosa León.

No desentona

Los grandes elogios son para Abalde y Torrens, pero Gema García (Málaga, 1985) no desentona. Ante el UB Barça aportó lo que su compañera 'Choche' Alonso fue incapaz: orden, puntos (8, 2/3 en triples), un rebote y una asistencia y dos recuperaciones. Su última canasta cerró un parcial de 0-7 y permitió soñar a su equipo. 67-65 a poco menos de un minuto. Pero el UB Barça sentenció desde la línea de personal, pese a fallar cuatro de sus últimos lanzamientos.

Apostar por las más jóvenes es la filosofía del Real Club Celta Vigourbán, como asegura el técnico Miguel Méndez, que matiza: "Están teniendo más minutos de los esperados, ya que hemos acumulado demasiados problemas con las extranjeras". Como la lesión de Vorackova, los problemas familiares de Cintia Silva o los problemas físicos de Melshika Bowman.

Gran salida

El físico es, según el propio Méndez, el gran lastre del equipo. "Hacemos una buena salida y después nos venimos abajo". Los números hoy refuerzan su tesis: 22 puntos en el primer cuarto por sólo 8 en el segundo; tras el descanso, de nuevo, mucha efectividad (23) para dar paso a minutos más mediocres (12).

El Celta hace disfrutar y sufrir. Hasta el final. 12 de sus 20 partidos acabaron con una diferencia igual o inferior a seis puntos. Tamara Abalde, Alba Torrens y compañía aún tienen que ganar varios partidos más para asegurarse su continuidad en Liga Femenina. El sábado, en Vigo ante el Estudiantes, afrontan quizás el más decisivo. Si ganan por más de seis puntos (65-59 en Magariños) tendrán tres partidos de ventaja y el basket average a favor con el penúltimo. Y sólo quedarán cinco fechas más.